La escritura de Borges fluye entre iluminaciones, luchando desde la otra cara, el hemisferio que acoge la magia y lo imperceptible, ya habitado entre otros, por Poe y De L’Isle. La posibilidad de asomarse le permitió comprender el tiempo como algo bien distinto. La muerte juega un papel vital en sus páginas. La vida se extingue y llega a su culmen. Tal vez él haya expirado cuando alguien lea Blind Pew, pero eso no quita que al lector le aguarde «incorruptible» el mismo tesoro. (más…)
