Literatura

Lo dijo Pessoa: la literatura es la prueba evidente de que la vida no basta.

Borges fluye entre iluminaciones

La escritura de Borges fluye entre iluminaciones, luchando desde la otra cara, el hemisferio que acoge la magia y lo imperceptible, ya habitado entre otros, por PoeDe L’Isle. La posibilidad de asomarse le permitió comprender el tiempo como algo bien distinto. La muerte juega un papel vital en sus páginas. La vida se extingue y llega a su culmen. Tal vez él haya expirado cuando alguien lea Blind Pew, pero eso no quita que al lector le aguarde «incorruptible» el mismo tesoro. (más…)

Jean Lartéguy, mirada alta

Uno puede imaginarlo todavía. Jean Lartéguy, mirada alta. Chaqueta oscura de pana, camisa blanca de cuello fino. Un botón por cruzar, sin corbata. Gaullista, escéptico, lúcido. De palabras y silencios, hombre de derrota. Lartéguy fue la clase de soldado para quien morir en batalla –rostro firme, arma empuñada– es la forma más noble de hacerlo. A Lartéguy le repugnaba la intelectualidad francesa que, apoltronada en sus sillones, bebiendo whiskey caro, con las piernas cruzadas y fumando de pipa, juzgaba los métodos de guerra de sus tropas y relativizaba las intenciones del enemigo. Nació en el Valle del Marne, el 5 de septiembre de 1920, y murió un día como hoy, hace cinco años, en París. Lartéguy avanzaba donde las bombas abrían camino. (más…)

Szymborska, ojos oscuros

Szymborska quería tener los ojos claros solo porque los suyos eran oscuros. Tantas veces deseamos ser quienes no somos. Pero ella, Wislawa, supo ser única en el modo en que lo son unos pocos dedos. Ella fue voz y parte; ella fue tortura y aliento. Un día escribió que debían ser dos por cada mil personas a quienes les gusta la poesía: “como les gusta la sopa de caldo/ como les gustan los cumplidos y el color azul” [1]. En tiempos de podredumbre su inspiración se reveló como luz que guía, tardíamente reconocida. (más…)

Juan Rulfo no escribía santos

Juan Rulfo no escribía santos. Por eso dijo un día que debió nacer de noche. Por tanta oscuridad, por tanta mala sombra. No es fácil leerlo sin caer abatido de la tristeza o aturdido por su talento. Luego se dejó morir, o se secó, o se recluyó en sí mismo, abrasado por la canícula del tiempo, intimidado por la gloria de Pedro Páramo. Rulfo fue por tres años el mejor escritor sobre la Tierra; no parió México un narrador igual. (más…)

Hawthorne y la alegoría narrativa

En 1873 Nathaniel Hawthorne le escribió a Longfellow: «Me he convertido en prisionero de mí mismo, me he encerrado en una mazmorra y ahora ya no encuentro la llave para ponerme en libertad –y si la puerta estuviera abierta casi tendría miedo de salir». Con este testimonio se ve hasta qué punto vivió recluido, ajeno a sus coetáneos como Poe. En vida no se le reconoció como uno de los grandes hombres de las letras estadounidenses. Tampoco acababa de causar sensación entre las revistas literarias de la época, aunque muchos sabían de su calidad narrativa y admiraban su enorme potencial. (más…)

Honoré de Balzac: La obra maestra desconocida

La relación arte-artista, el proceso creativo en la elaboración artística y la recepción de la obra son algunos de los temas que trató el novelista francés Honoré de Balzac en su prolífera producción literaria conocida con el nombre de la Comedia humana. (más…)